Como sabéis es importante ser regulares, sobre todo en regularidad (redundante) y a nuestra forma lo fuimos….
Se masca la tragedia…en nuestro caso se va a masticar.
La II Clásica de Cáceres es una prueba trabajada, muy bien trabajada, y viniendo de Roberto Carlos, al que conocimos cuando empezaba, cuando nos adelantaba y ahora que nos supera, sabíamos que iba a ser una gran…prueba, que él se ha currado mucho, pero que también vamos a currar nosotros.
Vale de rollos de vintage cerebral, vamos con la prueba, que hay miga!!
Preparamos el 405, (yo culpable), nos aseguramos que las desgracias pasadas no se repitieran, revisamos niveles, presiones, de un coche que nunca falla, al menos en su zona de confort.
Al día siguiente, temprano, excesivamente temprano para una persona racional, arrancamos para Cáceres después de un frugal desayuno de churros con chocolate. Llegamos a tiempo de hacer el tramo de calibración que salió a la primera, y que tras comprobarlo nos cuadró al 100%. Lo que bien empieza…
En el roadbook, vimos mucha navegación, por lo que estuvimos muy atentos (la cagamos por otra cosa).
Teníamos el número ¡¡13!! Por primera vez en mi historia, creo…¿buena o mala suerte? Lo que fuera no ha sido culpa del 13….(lo siento Ángel, en el golf llevamos 12+1).
Tras un primer tramo donde más o menos íbamos bien, llegó un segundo que descuadraba muchos metros, y donde perdíamos el tren de los 10 primeros.
El tercero aún peor, procedimos a ajustar calibraciones, pero parecía que nada iba bien.
Antes de la salida del cuarto tramo, Roberto Carlos, omnipresente como siempre, nos dice en la salida que miremos la presión de una rueda….
¿Cuál? Cada una tenía un 25% de posibilidades. La sonda iba puesta en la delantera derecha…
¡¡Premio!! Has acertado.
Hicimos dos tramos con menos aire que los camarotes del Titanic, y más preocupados por no someter la rueda a esfuerzos, que a otra cosa, imagina la diferencia de metros….
Nooooo, más todavía!!
Al final encontramos una gasolinera en la ruta y le metemos 3,5 kg de presión, llegamos al agrupamiento en Madroñera, donde Manety, autóctono, nos dice que nos acerquemos a un taller o a una gasolinera por si tienen un reparapinchazos.
A estas alturas, habrás imaginado que ni la rueda de repuesto, ni otra rueda llevaban imán para la sonda…probablemente lo pongamos ahora y probablemente no nos haga falta nunca.
Cambiar la rueda de la sonda con otro dibujo, otras presiones, etc… no parece que sea lo mejor…y total no se pincha nunca… salvo cuando se pincha (o algo parecido)
Pues no, no había repara pinchazos, pero la rueda estaba a 3,2 luego no perdía mucho aire, entonces volvimos a hinchar a 3,5, llegamos tarde a la salida del tramo, y algún retraso provocado por retenciones para charlar….ajustar la calibración a ojo… de mal cubero, porque lo hicimos al revés, total que nos costó otros tres tramos coger una calibración decente.
Pues nada…a pesar de ello, íbamos mejorando en la posición. “Sólo” nos perdimos una vez, a pesar que era lo que más temíamos, un par de teclas mal pisadas, pero íbamos mejorando y sobre todo acostumbrándonos al ritmo regulero, después de meses de “descanso”.
Últimos tramos de noche, con parrilla y nos encontramos con un tramo de 18 cambios de media a referencia externa en 3 km, y te dan el tiempo.
Algo que no nos gusta, porque si no sabes la distancia (ni siquiera aproximada como en un hito), ni la velocidad, no puedes calcular el tiempo, luego tienes que confiar en la suerte, algo que no es muy de regularidad.
Por tanto decidimos pasar de las referencias y ajustar por tiempo final, y la cagamos al cargar el tiempo. Error nuestro, por lo que adelantamos al coche de delante ¡¡por tercera vez!!
Les pedimos perdón públicamente, por esta y por la primera vez.
Los tramos de la noche eran por pueblos con mucha navegación de calles, que crearon cierta alarma entre los vecinos, lo cual particularmente no nos gusta mucho.
Al final al llegar a la plaza de Cáceres de nuevo, la sorpresa….¡¡Había más gente que en un rallye del mundial!! Algunas veces nos encanta (y nos da enviedia) ver la afición de algunos sitios, sobre todo cuando está tan bien organizado.
De la prueba, poco hay que contar que no sea bueno, larga, complicada, con algunas sorpresas, y muy pero que muy bien organizada
Quizá la navegación por los pueblos, por lo que conlleva, y sobre todo los tramos de parceleros de noche, que con los focos, se acordarían de nuestra línea de ascendencia hasta 5º grado.
Pero esto no puede empañar una gran labor de organización que han realizado en este rally.
Ahhh!! Y comimos de puta madre (eso si que no nos lo quita nadie).
Al final puesto 18º vuelta a casa, después de un porrón de kms, desde las cinco de la mañana, pero con la sonrisa de haber acabado.
…se me olvidadaba, al principio dijimos que en regularidad es importante ser regulares (redundante), y nosotros lo hicimos… la volvimos a cagar. Parece que el 405 no se le da bien la regularidad.
¿Volveremos a intentarlo o le dejamos de suplente eterno?
