Estábamos
esperando, mucho, para que llegase esta prueba, hacía mas de año y medio que no
hacíamos pruebas de regularidad de feva… y visto lo resultados…nosepaqué.
Pero como prueba
es siempre memorable, y como las buenas cosas se hacen esperar, esta X Ruta de
Invierno fue de las mejores, una mañana muy divertida.
Además, las “chicas”,
Eva y Maria José, aceptaron el reto de participar como equipo femenino en esta
prueba, con lo que sacamos casi todo el parque a la prueba.
Así que el
Lancia y el Peugeot se estrenaban en regularidad, Antonio y Carlos en el Lancia
Delta, y Eva y Maria José en el 405 Mi16.
Además, el 405
se hermanaba con el Tralla Team, incluso en resultados, ya que estuvieron a
punto de mojarnos la oreja a todos.
Con los coches
“ya calibrados” (y una leche, debimos calibra a ojo de buen cubero) … acudimos
al parque cerrado, y con el número 22 y 23 salíamos a “disputar” la prueba.
El rally esta
vez, estaba planteado por la zona de la Jara/Villuercas, así que el primer tramo
era Alcaudete, conocido por nosotros en pruebas de velocidad, así que esperando
al 405, casi no llegamos a la autosalida, y además se nos olvidó, como siempre,
calibrar en el tramo de enlace, así que salimos con “lo puesto”.
Pero lo que
empieza mal, siempre puede ir a peor, y al corregir acertamos justo en el
camino equivocado. Teníamos un 50% de posibilidades de acertar…y salió que no.
Así que en el
2º tramo, Gévalo, que es de nuestros tramos favoritos, “corregimos el error” al
revés, así que en la primera referencia, sólo íbamos un kilómetro de retraso, y
por detrás nos iban cogiendo…nos habían caído puntos para ganar 7 ligas, así que
ya no tenía remedio, lo único intentar salvar algún tramo.
Pero cuando
las cosas se hacen deprisa, se suelen hacer mal, y era el día de cagarla, así
que no dimos con la calibración adecuada, por mucho que lo intentamos.
Tras el tramo
de Alía, con nuevos descuadres, hicimos la parada. Un buen bocata, para reponer
fuerzas, y reparaciones de urgencia, y salimos para el tramo de Navatrasierra.
Estrecho con
curvas, ciervas que venían a ver la prueba, e incluso algún “conductor” que no
tenía muy caro desde su todoterreno, que la carretera es pública y de dos
sentidos, teniendo que llegar a pararnos… como las cosas que salen mal, pueden
ir a peor, pues también pueden hacer cosas raras, en este tramo la calibración,
era por defecto hasta la mitad y por exceso hasta el final…¿?
Terminamos con
el tramo de Fuentes, que creo que ha sido la primera vez que no se hacía en
sectores…y terminamos este rally, con una posición poco honrosa…
Luego viene lo
mejor de la prueba, la comida, las risas, esta vez nos tocaba ser motivo de
ellas, y alguna copilla que otra.
Willy, recibió
un merecido trofeo honorífico, dado su apoyo a esta prueba también, que le
entregó Victor del restaurante Antonio.
Rematada la X edición,
un estupendo rally, con una penosa actuación por nuestra parte, ha salido de
lujo y la inmensa mayoría de los participantes contentos, así que, a pesar de
lo que se trabaja en su organización, y los reveses sufridos, esperamos impacientes la XI edición.